En una casa en un lago remoto en las montañas de Adirondack, una pareja entretiene a una invitada de fuera de la ciudad que busca inspiración en su cine. El grupo cae rápidamente en un calculado juego de deseo, manipulación y celos, sin darse cuenta de lo peligrosamente entrelazadas que pronto se volverán sus vidas.
Una proxeneta llamada Wednesday (Keke Palmer) aprende de su padre a trabajar en el oficio de la prostitución callejera. Cuando él ya no está, ella es quien se hace cargo de su madre, una prostituta, y de su novia y mejor amiga, Nikki. La historia se ambienta en las duras calles del Bronx.