Concerje
Paco sabe que su madre murió de una enfermedad terminal, cuando él apenas tenía dos años, que su papá, Alvaro, se ha casado nuevamente, después de un largo duelo y que la hermana recién nacida lo acompañará de por vida. Tiene un extraño tatuaje en su antebrazo y sabe que fue el último mensaje de su madre antes de marcharse por primera vez, porque ahora sabe que la muerte fue un paso posterior al abandono.