Juan José del Rey

Películas

Gente en sitios
"Gente en sitios" es un "relato caleidoscópico" que recorre la comedia, el drama, el relato social, el terror y el surrealismo con el denominador común de "la irreductible poesía de la condición humana frente las embestidas de lo extraño y lo caótico".
Dispongo de barcos
El que va en bata
Cuatro hombres que puede que se conozcan de antes, deambulan por una ciudad extraña sin querer encontrarse y escuchando voces lejanas. Poco a poco su desencuentro se convierte en reencuentro, y sale a la superficie algo parecido a un misterioso pasado común. Todos ellos necesitan salir de su aislamiento por distintas razones, todas ellas relacionadas con poner coto a la locura. "Dispongo de Barcos" es una comedia de acción mental acerca de la soledad, el miedo, la necesidad de recordar y un robo fallido.
El asombroso mundo de Borjamari y Pocholo
Portero
En las noches de los años 80, Borjamari y Pocholo se mueven a sus anchas en la discoteca Aguacates. Expertos en hacer bromas “canallas” a las “niñas”, con su desparpajo son los reyes del local. Veinte años después, todo sigue igual. Sólo que ahora, los dos hermanos ya no son nada en Aguacates ni en el nuevo mundo. Nada excepto objeto de mofa y burla. Su primo Pelayo, de quien solían reirse y abusar en la adolescencia, reaparece en sus vidas: ahora es un moderno esquiador, ligón y popular. No ha dejado pasar el tren y se venga de las antiguas crueldades de Borjamari y Pocholo anunciándoles que Mecano va a reunirse en un concierto sorpresa. Borjamari y Pocholo se lo tragan y se lanzan a la aventura en compañía de Paloma, una chica romántica, emocionalmente compleja, que está pasando “de niña a mujer” y que entra en la historia como un ciclón. Paloma tiene las llaves del coche de papá y también las llaves de la felicidad de Borjamari y Pocholo. Son el trío perfecto.
Días de fútbol
Jorge tiene 30 años y piensa que su vida no puede empeorar. Su trabajo le deprime y su novia le deja cuando él le pide matrimonio. Pero aunque parezca mentira las cosas siempre pueden ir a peor y como muestra solo hay que echar un vistazo a sus amigos: Ramón no sabe que le saca más de quicio, si las ocurrencias de su mujer, o su más que perdida lucha contra la alopecia; Gonzalo lleva tanto tiempo estudiando derecho como buscando novia, y a este paso no parece que vaya a conseguir ninguna de las dos cosas; Carlos aspira a ser un gran actor pero no ha pasado de ser secundario en la teletienda; Miguel es policía y padre de familia pero su sueño es ser cantautor, lo que saca de quicio a su mujer. El único que parece llevar controladas las riendas de su vida es Antonio, pero eso no quiere decir mucho teniendo en cuenta que acaba de salir de la cárcel.