Darío Rivera

Manel y Judit lo dejaron hace tres meses, pero se citan para pasar juntos un último fin de semana de esquiada.

Santi, un joven de 17 años, juega al fútbol con sus colegas en la entrada del pueblo, mientras Marco, su amigo de la infancia, vuelve tras dos años ausente. El último verano que Marco estuvo en el pueblo, Santi empezó a sentir algo por él. Pero viviendo en esa cueva, lo mejor era que se olvidase de él y se centrase en construir su vida en base a las tradiciones. La vuelta de Marco desequilibra a Santi, que por fin había logrado olvidarlo. Bajo la conservadora mirada de todo el pueblo, deberá luchar contra sus sentimientos a la vez que se plantea por primera vez su identidad.

Alexandra ha jugado a tenis desde que tiene memoria. Tras años entrenando bajo la tutela de su padre Julio, un tenista retirado que pretende revivir sus victorias a través de ella, se ha convertido en una de las tenistas junior más prometedoras del circuito español. Durante la celebración de uno de los torneos más importantes de la temporada de 1978, la presión creciente que ejercerá su padre dentro y fuera de la pista empezará a afectar su salud mental. Con la llegada de la adolescencia y los interrogantes que esta conlleva, Alex se dará cuenta de que, quizás, este no es su destino.

Dos chicos de un equipo de fútbol, mantienen una relación actuando como pueden para no ser descubiertos. Una noche de pasión en un túnel de lavado, podrá desencadenar un cambio en sus vidas.