Algunas victorias deportivas van más allá de la consecución de un título. Algunas pasan a la historia. La película sigue el enfrentamiento más dramático y legendario de la historia del ajedrez: la partida de 1978 entre Anatoly Karpov, entonces campeón del mundo, y Viktor Korchnoi, su antiguo mentor y desertor a occidente. En esta batalla entre dos ajedrecistas excepcionales, un duelo de personalidades bajo una inmensa presión psicológica, lo que está en juego es incomprensiblemente alto.
La trama se centra en seis adolescentes de una ciudad sueca de provincias. Aparte de encontrarse en segundo curso de educación secundaria en el mismo instituto poco tienen en común hasta que descubren que son brujas y que han sido elegidas para salvar al mundo de un extraño peligro.
Cuando en España aún estábamos a vueltas con esa droga misteriosa llamada píldora anticonceptiva y el divorcio era cosa innombrable, los progresistas y enrollados suecos ya iban por la liberación de la mujer y la revolución sexual. La sociedad modelo de la Suecia de los 70, sin embargo, escondía una buena montaña de mugre bajo la alfombra. Call Girl cuenta una trama policíaca -basada en un caso real- en la que altos cargos políticos se ven envueltos en un escándalo de prostitución que seguimos a través de Iris, adolescente rebelde que termina enredada en el “negocio” mientras la policía hace la vista gorda.
Esperando poder distanciarse de la acusación de difamación que pesa sobre él, el periodista Mikael Blomkvist se traslada a una isla remota en el norte de Suecia donde la muerte aún no resuelta de una joven atormenta a su tío cuarenta años después. Alojado en una cabaña de la isla donde el asesino puede estar aún rondando, la investigación de Blomkvist le lleva a dibujar los secretos y mentiras de esta poderosa y rica familia junto a una rara aliada, la tatuada y hacker punki, Lisbeth Salander...