Describe la vida interna de un colegio de señoritas pertenecientes a familias de sólida posición económica que por tradición, indolencia o comodidad transfieren a distintos establecimientos educacionales la responsabilidad de la orientación moral, intelectual, espiritual y social a muchachas acostumbradas a una vida sin problemas, la mayoría con pésimos ejemplos de relación matrimonial y conducta de sus progenitores. Es así como caen en el caos emocional, desembocado en drogas, violencia, desvíos sexuales y prostitución.
Una pareja que está esperando un hijo, un día, aburridos de estar en casa y puesto que no localizan a ningún amigo, deciden ir a dar una vuelta con su perro. Por casualidad se cruzan con otra pareja, Bruno y Berta, que les invita a pasar la tarde en su casa. Una vez allí, comenzarán a sucederse hechos extraños.
Cuatro pícaros ladrones, cansados de la poca envergadura de sus asaltos, deciden arriesgarse robando el hotel más lujoso de la ciudad. Deben reclutar más ladrones a la banda, entre ellos una mujer. Entre cómicos enredos, tratan de incluirse como embajadores de una comisión rusa, pero tal es la torpeza, que son descubiertos y espectacularmente perseguidos. A partir de ese momento, mientras estudian los movimientos y preparativos para el desfile de modas y alhajas, generan hilarantes situaciones que complican aún más sus planes