Sugar
Jeffrey es un joven electricista que tiene como hobbie la bioquímica. En una reunión familiar en la que se celebra el cumpleaños de su padre, Jeffrey presencia la muerte de su novia, Elizabeth, despedazada por la cortadora de césped que acababan de regalar al homenajeado. Jeffrey coge alguna de las partes mutiladas, y las lleva a su taller. Su objetivo es devolver a la vida a Elizabeth, recomponiendo su cuerpo y animándolo con la energía eléctrica de una gran tormenta que se producirá en un par de días. Pero para ello necesita encontrar miembros frescos con los que componer un nuevo cuerpo para Elizabeth. Las prostitutas del otro lado de la ciudad serán las candidatas perfectas para conseguir un cuerpo para su chica.
Dancer
A group of sorority girls go up to a cabin in the woods accompanied by some boys. To their dismay, there is an escaped convict on the loose as well as the uncle of one of the girls. It's too bad that Uncle Ray is possessed by an Indian spirit turning him into a monster with a need for human blood.
Bordello Lady
En 1939 una nave espacial que transportaba a cuatro alienígenas escapó de prisioneros y se estrelló en la Tierra y los extraterrestres se apoderaron de los cadáveres de cuatro vecinos. Cincuenta años más tarde, los extraterrestres descubren que un artista ha escrito un cómic llamado "Space Avenger", que creen que se trata de ellos. Ellos van a Nueva York para tratar de matar al artista.
Everett's Dream Teacher
Everett and his party-hungry buddies embark on an all-night road-trip to the Florida beaches, for a week of fun, sun, and beautiful women. Mayhem ensues when 2 jealous girl-friends show up unexpectedly, along with a psycho teacher who's hunting down Everett because he owes her an overdue term-paper.
Blonde in Hell
Brian (Rick Hearst) es un tipo que vive con su hermano en un apartamento, cuando un día un extraño parásito con forma de pene y llamado Aylmer, se le aparece y le inyecta un alucinógeno líquido en el cerebro... Pero Aylmer le pide a Brian algo de alimento a cambio. Y lamentablemente Aylmer se alimenta de cerebros...