Un joven escritor intenta impresionar a una chica que conoce en Internet. Para ello le da un poco de lustre a su perfil, complicándose el asunto cuando ella se enamora de él.
Will Montgomery (Nicolas Cage) ha terminado en la cárcel después de haber consagrado su vida al robo de sucursales bancarias. Después de cumplir la sentencia, desilusionado con las perspectivas que le esperan, lo único que quiere es alejarse de ese tipo de vida y empezar desde cero. Una de las primeras cosas que quiere recuperar es el amor y la confianza de Allison, su hija (Sami Gayle), a la que nunca ha tenido el suficiente tiempo para dedicarle. Pero las cosas no serán exactamente como él espera: un amigo colega de trapicheos, Vincent (Josh Lucas), secuestrará a su hija para vengarse de él y de paso conseguir una buena tajada: 10 millones de dólares por el rescate. Will solo dispondrá de 24 horas para reunir esta cantidad y solo tendrá una persona en la que confiar, Riley (Malin Akerman), que le ayudará en esta carrera contrarreloj por recuperar con vida a Allison.
Un veterano policía llamado Eddie Dugan se encuentra en la última etapa de su carrera, muy quemado por los años de servicio y a una semana vista de comenzar su jubilación y retirarse a pescar a una cabaña en Connecticut. Por otro lado, el oficial de estupefacientes Sal Procida tiene claro que no hay ninguna línea que no cruzara para proporcionar a su mujer y sus siete hijos una vida estable y en paz. La tercera parte en discordia es Clarence "Tango" Butler, un policía que siempre se ha rodeado de hombres leales y que tiene una “relación especial” con Caz, uno de los narcotraficantes más infames de Brooklyn que en esos momentos se encuentra en prisión.