Duende #1
Ignacio (Jack Black) es un luchador gordo con un socio de equipo. Su madre era una misionera de Escandinavia y su padre era diácono de México. Murieron cuando Ignacio era pequeño. Creciendo como huérfano en un monasterio mexicano se convirtió en el cocinero del orfanato. Ignacio soñaba con convertirse en un luchador, pero la prohibición de la lucha en el monasterio no se lo permitía. Como en el orfanato la comida era escasa, a Nacho se le ocurrió un plan para conseguir el dinero para los huérfanos, ir a competir en la lucha libre, pero debe tener cuidado con la hermana Encarnación (Ana de la Reguera) con quien tiene mucho en común. Ignacio decide finalmente ser un luchador.
Midget
Sara Sandoval es una bella y altiva aristócrata mexicana que se ha educado en Europa y disfruta de los privilegios de una plácida existencia, sin privaciones de ninguna clase. Al otro extremo del espectro social está María Álvarez. Volcánica y rebelde, ella es la deslumbrante hija de un peón de campo. Ellas provienen de lados opuestos de la escala social y, en circunstancias normales, sus caminos probablemente no se hubiesen cruzado nunca. Pero el destino une a estas dos mujeres cuando una banda de pistoleros a sueldo, que trabajan para unos avariciosos barones del ferrocarril, roba las tierras de sus respectivas familias, atacando y asesinando a sus seres más queridos. Empujadas por la necesidad, María y Sara forman de mala gana una alianza con la intención de hallar cumplida venganza. Al decidir tomar cartas en el asunto, se convierten a su vez en prófugas de la ley y en ladronas de bancos.
Dwarf
El doctor Marius Zarcof y sus secuaces enanos raptan a Yolanda, una de las concursantes del certamen bellezas Señorita México, para congelar su cuerpo y revivirla cuando el doctor quiera. Ella es ahijada del luchador Mil máscaras, que avisa a sus colegas Blue demon, el Médico Asesino y Tinieblas. Blue y otros descubren al doctor en el aeropuerto, donde llevan varias muchachas congeladas, y echan abajo sus planes al vencerlo junto con sus enanos, aunque éstos adquieren la fuerza de cien hombres al meterse a una máquina. En el concurso aplauden a las muchas tanto como a los luchadores. Continúa en Vuelven los campeones justicieros.