Jacinto
Sebastián (17), empieza a cuidar solo el pequeño motel de su tío que está en la desolada costa tropical de Veracruz. Miranda (35) una corredora de inmuebles de la zona se encuentra ocasionalmente en el motel con Mario, su amante. Mario siempre llega tarde al encuentro amoroso por lo que Miranda tiene que esperarlo. Durante esos tiempos muertos, Sebastián y Miranda se van a conocer y poco a poco se irán aproximando a pesar de que en el fondo ambos saben que esa posible historia es solo pasajera.