Después de escuchar a un niño gritando pidiendo ayuda desde las verdes profundidades de un vasto campo de hierba alta, Becky, una mujer embarazada, y Cal, su hermano, aparcan su coche cerca de una misteriosa iglesia abandonada y entran imprudentemente en el campo, descubriendo que no están solos y que por alguna razón son incapaces de escapar de un laberinto vegetal completamente inextricable.
Ethan Morgan es el típico nuevo estudiante de instituto. Aunque ya ha alcanzado cierta edad, los padres de Ethan no confían en él para que cuide a Jane, su hermana pequeña. Así que sus padres deciden contratar a una estudiante más mayor del instituto para que se ocupe de hacer de niñera. Pero la noche en la que debe aparecer esta chica, en lugar de ella llega a la casa Sarah, a quien los padres de Ethan confunden con la niñera original. Esto hace que Ethan, Jane y Sarah se queden solos en casa. Es en ese momento cuando los temores de Ethan se confirman al descubrir, de una manera un poco peligrosa, que Sarah ha sido mordida por vampiros y que está camino de convertirse en uno de ellos. Y lo peor de todo es que el pueblo se encuentra infestado de estos chupasangres, a los que Ethan, con la ayuda de Sarah y de su amigo Benny, se tendrán que enfrentar para salvar a varios de sus conocidos.
El jugador de fútbol americano Terry Evanshen (David James Elliott), casado con Lorraine (Wendy Crewson) y padre de tres niñas, sufre un terrible accidente a raíz del cual queda sumido en un coma. Tras una temporada de gran sufrimiento para su familia, Terry despierta convertido en un hombre con una mente primaria, de un niño de 5 años, y sin recordar nada de su vida pasada.