Durante una semana de verano, una serie de originales personajes coinciden en el parque de una gran ciudad. Leticia, la encargada del párking, mantiene una estrecha y fogosa relación con un anónimo interlocutor a través de su emisora de radio. Iñaki y Moisés, dos discípulos de la Iglesia de los Santos Lázaros Resucitados conocen a Amaia, una chica de dieciséis años de la que Moisés se enamora. Silvio es un irónico jubilado que se pasa las horas en el parque en compañía de sus libros infantiles, sus cigarrillos y una moderna bicicleta que su nuera le ha comprado para que haga ejercicio. Gallo se prepara concienzudamente para jugar una partida de damas contra el mejor jugador del mundo. Estos personajes y otros como Pako y Remi, que regentan el bar del parque, o Braulio, el barquillero, se verán implicados, sin saberlo, en el resultado de esa partida.
Rosa
Jon va a casarse con Cristina, hija de Don Jaime, director del banco en el que trabaja Jon. Por casualidad, el día antes de su boda, Jon se encuentra con Carmen, su antigua novia, que ha vuelto a San Sebastián después de haber estado trabajando en África para la organización no gubernamental Médicos sin Fronteras. Tras dejar a su novia plantada en el altar, Jon es despedido de su empleo y su vida se convierte en una espiral de malentendidos que le conducen al desastre.