Un hombre y una mujer va un resort con sus respectivas familias y no pueden ocultar su sorpresa al verse el uno al otro. Ya se conocían, había tenido una cita a ciegas hace algún tiempo, una cita cuyo resultado no había sido para nada satisfactorio. No obstante, contra todo pronóstico, la tracción que entonces no sintieron hace ahora su aparición. Pero ellos no son los únicos que se ven beneficiados por esto, sus hijos también saben sacar partido a la situación, convirtiendo la creciente relación en algo de lo que pueden sacar provecho.
Wayne (Robert Redford), un conocido empresario, y Eileen Hayes (Helen Mirren) son una pareja que parece haber alcanzado el sueño americano. Pero todas sus ilusiones saltan por los aires cuando él es secuestrado por un hombre (Willem Dafoe) a plena luz del día. A medida que avanza la investigación del FBI, Eileen se entera de que detrás de las amables apariencias se esconde una vida llena de secretos, mentiras y miserias. Por su parte, Wayne, que siempre se había jactado de ser un astuto negociador, descubre, de repente, que su destino está en manos de un hombre que no tiene nada que perder y mucho que ganar.