Holly tiene un trabajo perfecto como publicista y su vida sería ideal si encontrase al novio perfecto, uno que se parezca al maniquí de una tienda que siempre se para a mirar. Un día, ese hombre aparece. De camino al trabajo, justo al pasar por delante de su admirado maniquí, tropieza y se golpea la cabeza al caer. Al despertar, un hombre con un gran parecido al muñeco de sus sueños la ayuda a levantarse y ella está segura de que ha encontrado a su novio perfecto. La idea no le hace mucha gracia a Milo, el ayudante de Holly en la agencia de publicidad en la que trabaja y el más ferviente admirador de la muchacha. (FILMAFFINITY)
Durante una semana de verano, una serie de originales personajes coinciden en el parque de una gran ciudad. Leticia, la encargada del párking, mantiene una estrecha y fogosa relación con un anónimo interlocutor a través de su emisora de radio. Iñaki y Moisés, dos discípulos de la Iglesia de los Santos Lázaros Resucitados conocen a Amaia, una chica de dieciséis años de la que Moisés se enamora. Silvio es un irónico jubilado que se pasa las horas en el parque en compañía de sus libros infantiles, sus cigarrillos y una moderna bicicleta que su nuera le ha comprado para que haga ejercicio. Gallo se prepara concienzudamente para jugar una partida de damas contra el mejor jugador del mundo. Estos personajes y otros como Pako y Remi, que regentan el bar del parque, o Braulio, el barquillero, se verán implicados, sin saberlo, en el resultado de esa partida.