Carla
John Kang, un policía de origen oriental experto en artes marciales, participa en una redada contra la mafia camboyana. El resultado es que varios miembros de la organización mueren en el asalto a su base de operaciones. Dentro de este grupo destaca el clan de los guerreros Shila, cuyo lema principal es sangre por sangre. Por eso, para cumplir con su máxima envían al Príncipe Samarki, un despiadado asesino que tiene la misión de acabar, uno a uno, con todos los policías que participaron en la matanza.