En 1968, los jóvenes italianos soñaban con cambiar el mundo; era aquel un tiempo en el que las normas se violaban, se reivindicaba el amor libre y todo parecía posible. Nicola, un atractivo joven de Puglia, a pesar de que sueña con ser actor, se hace policía y acaba introduciéndose en calidad de "topo" en el agitado mundo estudiantil. En la universidad conoce a Laura, una joven de familia católica de clase media y, además, una estudiante brillante y apasionada que sueña con un mundo sin injusticias. Allí también conoce a Libero, un estudiante y trabajador líder del movimiento estudiantil que sueña con la revolución.