German Son
Bill Marks (Liam Neeson), un veterano agente del servicio aéreo de los Marshalls, se siente bastante quemado tanto con el mundo como con su profesión: no entiende su labor como un deber para salvaguardar vidas, sino como un rutinario trabajo de oficina a bordo de un avión. Sin embargo, un día, en un viaje trasatlántico de Nueva York a Londres recibe una serie de misteriosos mensajes de texto, en los que se le pide que inste al gobierno a hacer una transferencia de 150 millones de dólares a una cuenta secreta, pues, en caso contrario, un pasajero moriría cada 20 minutos. El juego del gato y el ratón se desarrollado a 40.000 pies de altura y con la vida de 200 pasajeros pendiente de un hilo.