It is 5 May 1945 and the uprising against the hated German occupiers has broken out in Prague. The Czech guards open the gate of the Pankrác prison to allow the prisoners to escape en masse. Many of them are shot dead by the German guards but young Ruda (Jaromír Hanzlík) manages to run away. He is taken care of by one of the Prague fighters, concierge Kytka. Kytka hides him in the flat of the house's owner where only the young maid Karla (Jana Brejchová) is left, ordering her to take care of Ruda.
En una tienda de comestibles en Praga, Alena, una atractiva joven, tiene una aventura con Vorell, el gerente de la tienda, un hombre casado. Aunque es plenamente consciente de que Vorell es un sinvergüenza que ha estado robando licor de la tienda, la necesidad física de Alena por él es tan grande que no puede romper su relación. Al llevar a cabo un inventario, se descubre que 80 botellas de brandy contienen té. Cuando los dos auditores de la compañía, Kurka y Bazant, interrogan a los empleados, Alena sale corriendo de la tienda, presa del pánico. Kurka, un hombre intolerante cuyo sentido del deber ha destrozado su matrimonio, inmediatamente culpa a Alena. Cuando Alena, totalmente perturbada, recurre a Vorell para pedirle consejo, este le sugiere con total falta de sensibilidad que asuma ella la culpa, ya que la pondrían en libertad condicional, mientras que él, en caso de ser acusado, sería enviado a prisión...