Un gigantesco tiburón blanco de cinco cabezas comienza a causar estragos en el océano antes de invadir las playas de Puerto Rico, sembrando el terror en lo que antes era un pacífico paraíso.
Un grupo de jovenes, amantes de la velocidad y con necesidad de divertirse, se dedican a realizar carreras clandestinas, en donde la pasión pone a hervir la sangre y se entremezclan los celos, la venganza y el desafío a la autoridad.
Dos matrimonios ven como sus vidas se transforman ante la tragedia que representa la pérdida de un hijo. Ambas familias, devastadas por el triste suceso, enfrentan la pérdida desde su propia naturaleza permitiendo que afloren sentimientos de culpa, negación y celos hasta llevarlos a una conclusión donde la desintegración familiar es prácticamente inevitable.