Los familiares de Pierre quieren convertir su casa en un burdel. Por su parte, su tía se esfuerza por no ceder a la atracción romántica hacia su sobrino.
Mientras Corey sale de prisión tras cumplir condena en una cárcel francesa, Vogel, un criminal custodiado por el temible comisario Mattei, escapa del tren en el que viajan. Después de robar a un antiguo socio, Corey se encuentra con Vogel y le propone formar equipo para realizar un meticuloso robo de joyas.