Juana González

Películas

Demasiado viejo para morir joven
Editor
En Barcelona, dos amigos encuentran únicamente trabajos eventuales. Uno deja de ser camarero para hacerse mensajero; el otro está trabajando como taxista. El mensajero, en su ir y venir nocturno, pasa por muchas oficinas, casas particulares y bares, y se ve en las situaciones más variopintas: unas tenebrosas, otras siniestras o patéticas, y algunas incluso agradables.
El enigma del yate
Editor
Por prescripción médica, Natalia embarca en un yate para disfrutar de unas merecidas vacaciones. Con ella viajan Carlos, su marido, Blanca, amante de Carlos, y el marido de ésta última. Las pasiones explotan a bordo.
El E.T.E. y el Oto
Editor
A la Tierra llega una nave espacial, dejando abandonado a un ser extraterrestre. Éste se encuentra con un niño con el que entabla amistad. Parodia de la película "E.T. El Extraterrestre" de Steven Spielberg.
Fraude matrimonial
Assistant Editor
La madre de Julio le obliga a casarse con una estudiante para librarle de su amor por un pintor. La unión entre ellos es un fracaso debido a la nefasta influencia que su madre ejerció sobre él, produciéndole un complejo de Edipo negativo. Más tarde, Julio, descubre que el pintor tiene otro amante, por lo que decide vengarse.
Las marginadas
Assistant Editor
Cuatro mujeres –una alcohólica, una ex prostituta, una a la que la edad no perdona, y otra a la que ha dejado tirada el novio– aúnan fuerzas para sobreponerse a sus problemas y ser felices.
Los fabulosos de Trinidad
Assistant Editor
En un pueblo del salvaje oeste, la Srta. Nora, una bella contrabandista, conoce a Scott, un cazador de recompensas que la acompaña a México por asuntos de trabajo. Mientras, en México, tres contrabandistas arrestados por los militares son liberados gracias a la chica, que utilizará todas sus dotes de seducción para conseguir salirse con la suya. Pero el jefe de la guerrilla se da cuenta de la trampa y ahora los tres contrabandistas son considerados unos fugitivos perseguidos por los revolucionarios mexicanos y también por Scott, ya que la ley ha puesto precio a sus cabezas.