Pablo, un chico de diecisiete años, vive en Madrid con su madre, una abogada matrimonialista de cierto éxito. En su época universitaria, en los turbulentos años setenta, fue una feminista radical y una comprometida militante de un partido de extrema izquierda. Su actitud libertaria la llevó a decidir tener a su hijo, al que nunca le habló de su padre. Sin embargo, el deseo de saber quién es su progenitor, se ha convertido para Pablo en una verdadera obsesión.
Criada 1ª
Juan Ruiz (Manolo Otero) continúa su lucha por el buen amor. Protegido de Zubeida, la dueña de la casa de baños, compone sus versos y los recita al pueblo. Por alguno de ellos tiene diferencias con la autoridad religiosa y es encarcelado. Un enviado del Arzobispo de Toledo lo libera intentando convencerle para que entre al servicio de la Iglesia.