Astudillo
Gerónimo es un hombre de 45 años devastado por un suceso trágico. Su amigo Julián intenta sacarlo a flote animándolo a participar en el proyecto de un poblado marginal de los alrededores de Buenos Aires. Los dos son sacerdotes católicos que decidieron dedicar su vida a los más pobres: Gerónimo en el Tercer Mundo y Julián en Argentina. Mientras trabajan en Villa Virgen, Gerónimo empieza a cuestionarse si la Iglesia es la institución adecuada para proteger a los más débiles. Julián, por su parte, decide que el mejor camino para cambiar las condiciones de vida de los necesitados es la política. El contrapunto lo representa Luciana, una abogada atea, que tiene una perspectiva distinta sobre las reformas sociales.