En esta obra se introduce la alta clase media como tal –terratenientes que viven en Madrid de sus rentas y sin trabajar-, clase pudiente que no tiene que ocuparse en nada y habla de celos, de amor, de matrimonio; habla de eso filosóficamente como el título indica. Su tono y estilo son naturales; su relación con los criados también. Los señoritos aluden al “demi monde” con modales que le convienen y que son si no más auténticos por lo menos tanto como los de salón. Pese a la intención del autor, penetramos en ese mezquino mundillo socio-moral. En cambio, la intención del comediógrafo es evidente por lo que se refiere a la renovación espacial y al manejar una acción sencilla con personajes de sus días. Con El hombre de mundo alcanza Ventura de la Vega su mayor éxito y uno de los triunfos mayores de la época. El hombre de mundo preludia la “alta comedia” y es el paso obligado para llegar desde Bretón a López de Ayala o a Tamayo y Baus.
El joven Luis, recién licenciado en Económicas y muy crítico hacia el mundo que le rodea, intenta buscar un sitio en la sociedad.
Princesa (segment "Los tres pelos del diablo")
Primera película de Eloy de la Iglesia, en la que adapta varios cuentos de hadas de grandes autores como Andersen o los hermanos Grimm, así como "El mago de Oz".