Cuando Kelly y Jason, completamente opuestos, compiten en un famoso programa de cocina por la posibilidad de tener su propio restaurante, ¿qué importará más, sus carreras culinarias o su posible amor?
Nikki es admitida a trabajar en el restaurante de su ídolo. Una vez que es despedida injustamente junto a un amigo, decide abrir su propio negocio y demostrar que su comida es mejor.