Townee
James, que ha sido ciego desde la juventud, vive feliz con su esposa Sam y su hijo Jonah. Un día recupera su visión y descubre que un tumor inoperable que había estado presionando sus nervios ópticos en su cabeza desde que era un adolescente se ha reducido milagrosamente. Lleno de felicidad, James y Sam hacen planes para su futuro. Sin embargo, James se está volviendo metafóricamente ciego por su obsesión por lo superficial en su búsqueda del éxito.