Judge
Maurice Castle (Nicol Williamson) es un mediocre empleado del servicio de inteligencia británico que trabaja recopilando rutinaria información de los países de África. En la época del Appartheid estuvo destinado en Sudáfrica y se casó con una nativa. Castle observa impotente cómo un compañero y amigo suyo es implicado erronéamente en un caso de contraespionaje.