A repressed agoraphobic's daughter meets a hardened pastor's daughter, and while escaping their homes to attend the annual church youth group jamboree they discover their worlds aren't what they once thought they were.
A group of friends on a road trip seek shelter at a mental institution in the woods, only to discover that the building is the home of a mysterious young girl named Roxy whose unsettling presence serves as a foreshadow of doom. Later, as the group attempt to unravel the mystery of Roxy, who seems to have endured years of abuse, a mysterious killer begins to hunt them from the darkness.
Las "chicas guepardo" -Galleria, Chanel, Aquanette y Dorinda- son cuatro adolescentes de Nueva York destinadas al estrellato. Intentan convencer a dos de las madres, Dorothea y Juanita, para que las acompañen a Barcelona, ya que quieren disfrutar de una "experiencia cultural y educacional", aunque su verdadero objetivo es participar en el Festival de las Nuevas Voces de la Música que se celebra allí. Ya en la ciudad condal, sus intereses personales comienzan a llevarlas en diferentes direcciones... (FILMAFFINITY)
Centrada alrededor de la denominada "Caza de brujas" del senador McCarthy, "Punto de mira" relata la agitada carrera artística del director de cine Herbert J. Biberman, que entró a formar parte de las listas negras a raíz de su filme de 1954 "La sal de la tierra" (film que, por cierto, es uno de los pocos preservados por la Librería del Congreso de los Estados Unidos por su importancia histórica y cultural). La película se inicia con la ceremonia de entrega de los Oscar de Hollywood de 1937, cuando su esposa Gale Sondergaard gana el premio a la mejor actriz de reparto. Diez años más tarde, un grupo de directores de Hollywood, entre los que se encuentra Biberman, son tildados de comunistas y obligados a comparecer ante una comisión del congreso.
Zoe (Daphna Kastner), joven escritora norteamericana, llega a Madrid para realizar una serie de entrevistas con las que pretende documentar un libro sobre el machismo. Por medio de un anuncio en el periódico local contrata los servicios de Antonio (Toni Cantó), un intérprete. La relación empieza mal, pero se complica aún más cuando resulta que el joven español tiene ideas propias sobre el proyecto de Zoe. Entre los dos existe una atracción innegable que da mucha energía a sus peleas. Ella es una joven que al parecer tiene serios problemas con casi todos los hombres. Por otra parte, él es un latino típico que piensa que las mujeres existen para consumirlas con el máximo gusto y el mínimo compromiso. Esta actitud le convierte en el colaborador menos adecuado para el proyecto de Zoe...
Con una amenaza de desahucio pesando sobre sus hombros, Don Miguel, propietario de un hotel de Mallorca, intenta hacer frente al pago de sus interminables deudas.