El fracasado guionista de Hollywood Steven Schats (Matthew Broderick) vive con la esperanza de que le acepten un guión, pero tiene que conformarse con un trabajo de taquillero en el Teatro Chino. Sin embargo, un día, después de que su guión haya sido rechazado mil veces, encuentra un productor (Baldwin) que se interesa por él. Lo que Steven ignora es que se trata de un agente del FBI y que el rodaje no será más que la tapadera de una misión secreta de la agencia.
El fracasado guionista de Hollywood Steven Schats (Matthew Broderick) vive con la esperanza de que le acepten un guión, pero tiene que conformarse con un trabajo de taquillero en el Teatro Chino. Sin embargo, un día, después de que su guión haya sido rechazado mil veces, encuentra un productor (Baldwin) que se interesa por él. Lo que Steven ignora es que se trata de un agente del FBI y que el rodaje no será más que la tapadera de una misión secreta de la agencia.
Los padres de Daryl Cage se están separando, así que éste deja su granja en Iowa para vivir una temporada con su hermano mayor que reside en Los Angeles, en cuyo aeropuerto ambos recogen la maleta equivocada que meten en su furgoneta, sin saber que contiene un alijo de heroína. Los receptores de la droga caen pronto en la cuenta de la equivocación e inician bajo las órdenes de su jefe Roy Gaddis la búsqueda del vehículo y sus ocupantes para recuperarla cuanto antes. Daryl no esperaba que su aventura en la gran ciudad le ofrecería la oportunidad de ser perseguido por traficantes de estupefacientes y por la misma policía que le acusará de asesinatos que nunca ha cometido.
Adam es un periodista de la popular Rolling Stone, y su nuevo artículo gira en torno al boom de los clubes de salud y deportes (estamos en los '80, recuerden) y cómo se han vuelto sitios predilectos de los solteros. Su proyecto promete, pero se le cruza una bella instructora de aeróbicos (Jamie Lee Curtis) y el asunto se le hace cuesta arriba.