María Carmen Matalonga

Películas

La boda era a las doce
Elisa, dependiente de una casa de modas, envía un modelo a una dirección equivocada. Por miedo a ser despedida decide recuperarlo por su cuenta. Tropieza con Alberto, un muchacho que se casa a las doce de la mañana y que va al mismo lugar.
Un mundo para mí
Recién licenciado en química, Andrés le dice a su padre, que no va a trabajar en su empresa porque quiere ser sacerdote. Su padre se opone rotundamente, no puede aceptar de ninguna manera su vocación religiosa y decide torcer sus planes contando con la ayuda de su sobrino Juan, un tarambana al que le encanta salir de juerga y conquistar mujeres guapas.