(as Mª Dolores Tovar)
María Preston, una azafata de Iberia, vive con una amiga y compañera de trabajo. Desde hace algún tiempo, nota que alguien la está siguiendo. Se trata de Charly, un empleado del aeropuerto, que luchó en Vietnam; es un hombre desquiciado debido a la infidelidad de su mujer, que ha hecho nacer en él una destructiva misoginia.
El Gobierno Británico envia a McDonald para que intente llegar a un pacto con los bucaneros.
(as María Dolores Tobar)
Un hombre llega a un pueblo del Oeste dispuesto a descubrir a los autores del atraco de un banco, donde desapareció una importante cantidad de oro y los testigos fueron asesinados cruelmente. Uno de los ladrones ahora está deshaciéndose de los cómplices, empleando unas mortíferas serpientes que sólo parecen obedecerle a él.
(as Mª Dolores Tovar)
Pedro y Mariano dedican más tiempo a las jóvenes de su agencia de publicidad que a sus esposas. Por ello, éstas deciden darles un escarmiento y se dejan seducir por otros. Inés entabla amistad con un boxeador y, por su parte, Susana liga con el vecino de enfrente. Cuando sus respectivos maridos descubren el juego, la situación ya se ha complicado demasiado para las dos parejas.
(as Mª Dolores Tovar)
Un prometedor guardameta del Real Madrid ve su oportunidad cuando su compañero sufre una lesión y es convocado para sustituirle. Pero la desgracia se cebará con él cuando un inoportuno accidente de coche le daña la columna y se ve obligado a renunciar al que tenía que ser el partido de su vida. Cansado de tanta mala suerte, se retira a un hotel de la costa, donde el azar le subirá a los escenarios.
Hace muchos años que Juan desea tener un hijo varón. Tiene siete hijas, de las casadas no le han dado más que nietas, por lo que vive angustiado rodeado de un mundo femenino y, en plena locura, decide mantener relaciones con una viuda que le promete tener un hijo, puesto que toda su descendencia anterior han sido varones.