Mario
Ana es una arquitecta de 35 años, recién divorciada, con dos niñas pequeñas e hija de exiliados chilenos. Cuando una de las hijas de Ana le abre una cuenta en Facebook a su abuela, ella reconecta con un antiguo amor de la universidad, a quien verá pronto en Chile. Desde ese momento la vida de Ana tambalea, pues repite el rol de su madre y se convierte en esa mujer que nunca quiso ser.