Capulina y su novia venden jugos y frutas en un puesto en la Glorieta del Centro de la ciudad de Monterrey; pero al llegar un grupo de ladronzuelos de autos comienzan los problemas, pues destruyen el puesto de Capulina, y tras golpear a uno de los pillos, empieza una persecución en autos por toda la ciudad, provocando un desorden completo.