Stevie (Cameron Van Hoy) es un adolescente asmático de 13 años. Jugando en el cuarto de su madre, descubre una pistola. Su novia Rockie (Mischa Barton) llega a buscarle y se dirigen a la escuela. En el camino, Stevie decide que no soporta el aire irrespirable de la ciudad y quiere escapar. Al pasar por delante de un banco deciden robarlo. Pero lo que en un principio les parecía tan fácil no lo es tanto. Inmediatamente les rodean cientos de policías, liderados por el comandante del FBI Daniel Bender (Burt Reynolds). Rockie y Stevie tendrán ahora que tomar rehenes. Todos los medios de comunicación tienen los ojos puestos en tan singular atraco. Mientras, la labor del comandante Bender es conseguir que todo se resuelva sin ningún herido.
Un arquitecto construye una nueva iglesia en San Francisco que finalmente desagrada a la comunidad local de vampiros, por lo que su líder, Anton Voytek, mata a la novia del hombre para mostrar su disgusto. Luego, el arquitecto se une a un policía local para vengarse