Ilias Apostolou, un joven peletero que tuvo dificultades durante la dictadura, deja Castoria en 1971 para emigrar a Francia, donde espera unirse a un pariente lejano suyo, Gerassimos Tzivas, que ha estado viviendo allí desde 1950. Con él sólo se lleva de su tierra natal una fotografía de una persona que se encuentra en el pavimento. Le pide a Gerassimos que lo ayude a encontrar trabajo en París. Un malentendido en torno a la fotografía, sin embargo, desencadena una serie de eventos dramáticos.