Returning home to Prague, the magician Pasparte, an owner of a circus caravan, meets his dying colleague who entrusts his beautiful daughter Aloisie to his care. In Prague they all take up their lodgings at the house At Blue Fish in which they intend to arrange the programs. The firm is owned by widow Evzenie with whom Pasparte shares flat and bed. Evzenie is jealous of Aloisie therefore Pasparte sends Aloisie as a housewife to the single man Jakub Kolenatý who earns his living by photographing and wants to record the revived pictures of Prague. Pasparte wants to found in Prague the first permanent Czech movie theatre in which there would be projected also the original Czech films.
Dancer
Martin, a poor student, volunteers to go on a quest to find a cure for the princess Adriana, who is stricken with a strange illness. Unknown to Martin or anyone else, the princess is actually under the spell of the powerful magician Andlobrandini, who is preparing a rejuvenating elixir made from the blood of nine men's hearts.
Dancer
Una de las tres hijas de un mercader, se adentra en el bosque buscando ayuda para su padre enfermo, hasta que es raptada por una bestia que sufre una maldición. La bestia, cautivada por la belleza de la joven, decide retenerla en su castillo pero no atacarla. La chica, ayudará a la bestia a vencer la maldición
Sátira política y social checoslovaca surrealista que utiliza como trasfondo el viaje de Lemuel Gulliver a los países de Balnibari y Laputa, con una atmósfera que es en parte Kafka y en parte Carroll.
Lemuel Gulliver (Lubomír Kostelka) ha tenido un accidente automovilístico y continúa su viaje a pie por el campo desconocido. En el camino encuentra un conejo muerto vestido de hombre y saca un reloj del bolsillo del pecho de su chaleco. La casa medio en ruinas en la que entra le recuerda a Lemuel su infancia y le trae un recuerdo doloroso de una niña muy querida, Markéta, que se ahogó hace años. Gulliver se encuentra en Balnibarbi, un país donde no entiende las leyes y los hábitos y por lo tanto continuamente ofende la decencia pública. Es un día en el que se ordena a las personas que mantengan la boca cerrada y obligan a su visitante a hacer lo mismo. Se enfrenta a un duro interrogatorio y le resulta difícil explicar que él no es el conejo Oscar cuyo reloj se ha encontrado en su poder.