Hendrik tiene 16 años y vive en la ciudad, pero está enfadado porque su madre ha decidido mudarse con él y con su hermano a un pequeño pueblo del sur de Austria. Para empeorar las cosas, los locales dicen que la casa está encantada. Cuando su hermano Eddi empieza a hacer símbolos extraños en las paredes, Hendrik decide averiguar qué es lo que pasa en la casa.
Alice, una madre soltera que vive dedicada más a su trabajo como ingeniera genética que a Joe, su hijo adolescente, desarrolla una nueva variedad de flor que supuestamente tiene la capacidad de hacer feliz a su dueño gracias a sus especiales propiedades químicas.
Jakob, de 17 años, no quiere nada más que sentirse vivo. Los ataques de ansiedad incontrolables le impiden hacerlo y lo obligan a escapar a mundos virtuales. Una noche, conoce a Kristjan, de 26 años, en un chat de cámara. Su encuentro marca el comienzo de un viaje transpersonal a las heridas de sus almas.
Paula, una chica de diecisiete años, está secretamente enamorada de Charlotte, una compañera de clase que tiene novio. Al mismo tiempo, Tim se siente atraído por Paula, quien tendrá que decidir entre ser consecuente con sus deseos o dejarse llevar por los de los demás.
Konrad y Maja forman una pareja perfecta, con dos hijos fantásticos. Él es jardinero y ella, después de doctorarse, acaba de conseguir un trabajo muy bueno como investigadora en una clínica de renombre. La vida les sonríe. El día que Maja se presenta a su nuevo trabajo, Konrad la acompaña con la moto y después de dejarla tiene un accidente sin importancia. Enseguida le atienden y le operan en la misma clínica, y parece que el incidente haya quedado superado. Pero al cabo de unos días, Konrad se empieza a encontrar mal, hasta el punto que la han de ingresar en un hospital con una sepsis muy grave. Desafiando las órdenes de sus superiores, Maja comienza a investigar qué pudo haber pasado durante la operación de su marido para que haya contraído una enfermedad tan grave, y al final tendrá que elegir entre la fidelidad a la empresa y la verdad y la salud de Konrad.
Not having bitten anyone at the age of 25 makes the young vampire Victor feel quite inadequate. New hope blooms, however, when he meets Sophia, a young doctor.