Julio es un niño que vive con sus padres en una casa apartada del pueblo. Su padre comete asesinatos ocultando su rostro tras una máscara mientras Carmen, su madre, regenta una pequeña tienda de alimentación. Diez años más tarde, un grupo de amigos van a pasar un fin de semana en una casa rural del pueblo, el cual se ha hecho famoso por las numerosas desapariciones que sucedieron tiempo atrás. El grupo visita la tienda regentada por Carmen y Julio el mismo día en el que él cumple 18 años, produciéndose un primer encuentro fugaz entre ellos. Carmen tiene una sorpresa preparada para su hijo, una máscara como la de su padre. Julio deberá elegir entre continuar la tradición familiar de ser asesino o abrazar el amor de Úrsula, una de las chicas del grupo que acaba de conocer.
Juan y Lucía son dos supervivientes en una dura Córdoba post-apocalíptica. Tras años juntos, ambos tienen ahora en mente objetivos distintos, pero durante su camino se encontrarán con Elena. Una niña, que dice buscar a su familia. Su camino se complicará más de lo habitual debido a este inesperado encuentro.