Nada más salir del talego, Maki va a buscar a su amigo Popeye, ahora reciclado en banquero. Juntos rescatan al abuelo de una peligrosa forma de "ruleta rusa" que se juega en el asilo, y deciden tomarse unas vacaciones en la playa. Un grupo de sudaméricanos que roban coches en las gasolineras, se llevará al abuelo secuestrado. Pero ese no será el único secuestro. Habrá persecuciones, ciegos de la ONCE convertidos en asesinos, asesores financieros gorrones, y mucho más.
Makinavaja y su amigo Popeye son dos delincuentes de los barrios bajos de Barcelona que día a día intentan salir adelante en un mundo lleno de injusticias.
Charly
Bryan Foster, un hombre de gran fortuna que vive retirado en una finca de la Costa Brava con su hija Lolita, ha recibido una amenaza de muerte. Foster va al aeropuerto de Barcelona para encontrarse con Cunningham, un investigador privado norteamericano y pedirle ayuda. El detective no puede ayudarle pues debe subir a un avión que está a punto de despegar. Horas después, Foster llama a Cunningham, que asiste a la muerte de Foster por teléfono. Cunningham, con la ayuda del inspector Computer, inicia la investigación. Van surgiendo sospechosos y también un influyente hombre de negocios que actúa como protector de Lolita.