Camarero latino
Nuria tiene la vida perfecta. Triunfa en su trabajo, tiene un compañero al que adora y una casa maravillosa. Sin embargo, hay un aspecto que falla: no está divorciada de su anterior pareja, Jorge. Éste, por su parte, pasa una época en la que todo falla: está en el paro, su casa se cae a trozos y no consigue novia. Mientras Nuria ha conseguido rehacer su vida sin el, Jorge sigue soportando el peso de la culpabilidad por haber hecho que los padres de ella se arruinaran a causa de la crisis y unas inversiones fallidas, sumadas a las acciones preferentes de la entidad bancaria en la que trabajaba. Nuria, que siente lástima de Jorge, no quiere hundirle con su petición por lo que finge que no está bien y que tampoco ha superado su historia y, al mismo tiempo, le hace creer que sus padres están mejor que nunca. De esta manera pretende que él se fortalezca y acepte el divorcio.
Aldrin
Jon, un quinceañero conflictivo y desobediente empieza a juntarse con malas compañías. Para remediar esta complicada situación, la madre del joven, decide enviar a su hijo a un pequeño pueblo ribereño con su abuelo, un militar ya retirado que ejerció en la Guerra de las Malvinas entre la República Argentina y el Reino Unido. El estricto anciano intentará encauzar al chico a través de distintos cauces de educación y disciplina.