Reino Unido, 24 de marzo de 1954. Diez años antes de la despenalización de la homosexualidad, el periodista Peter Wildeblood y sus amigos Lord Montagu y Michael Pitt-Rivers son condenados y encarcelados por indecencia y sodomía.
Un ex-soldado traumatizado se despierta en la parte trasera de una camioneta. A su lado se halla un niño secuestrado. Ahora tan sólo dispone de nueve minutos y treinta y siete segundos de consciencia para averiguar por qué y cómo llegó hasta allí.