Executive Producer
Jess, una madre y enfermera recién separada, se muda a su antigua granja familiar con Tyler, su hija adolescente, y Owen, su hijo de ocho años. Una noche, el perro de la familia detecta algo en el bosque y sale corriendo a buscarlo. Regresa un par de días después y ataca a Owen, mordiéndolo salvajemente antes de que Jess pueda intervenir. Owen es llevado de urgencia al hospital. Su condición empeora y nadie puede entender por qué... hasta que Jess descubre una cura inquietante...
Executive Producer
Riley (Alexandra Shipp) y Chris (Nicholas Hamilton) son dos adolescentes locamente enamorados cuya relación termina de manera abrupta tras un accidente de coche. Riley se culpa de la muerte de su novio, que ha quedado atrapado en el limbo. Sin embargo, ambos encuentran milagrosamente una forma de volver a encontrarse.