Mario se encuentra dominado por su asfixiante esposa y además sufre del bloqueo del escritor. Va a un bar local donde conoce a una exhuberante prostituta rubia a través de su compañero de piso, un gigoló gay. Con la ayuda de Mario, la chica consigue mejores trabajos en el mundo de la pornografía, incluyendo viajes al extranjero. Esto, que no parecen buenas noticias para Mario, le llevan a una etapa mejor en su vida.