Verónica es una mujer solitaria y económicamente autosuficiente, que junto a su hermano mayor mantiene en actividad una empresa constructora. Verónica no duda en asistir tanto a una prima víctima de violencia de género, como a poner límites en forma tajante a aquellos hombres que intentan invadir su espacio, sea en el ámbito laboral o en la vía pública.
Vero vive con su hermano mayor Abel, y ambos trabajan juntos en una obra en construcción. Allí debe soportar los avances de algunos de los operarios, aunque ya está acostumbrada porque trabaja en esto desde muy joven. En la frontera sigue a este personaje en su camino para convertirse en una mejor persona, el cual vemos ejemplificado en la manera en que ayuda a una prima que sufre violencia doméstica y en el momento en que se anota en una ONG que les da comida a los sintecho que viven sobre la avenida Paseo Colón.