Boom Operator
Tom es un hombre cuya vida ha dejado de tener sentido. En pleno colapso mental se cruza en la carretera con Rachel, una joven que llega tarde a trabajar y que, nerviosa, recrimina a Tom con el claxon que no mueva su coche en un semáforo. A partir de entonces dará comienzo un peligroso juego del gato y el ratón en el que el torbellino de esta ira en la carretera traspasará cualquier límite que Rachel jamás haya imaginado. Salvaje toma como testigo la adrenalina y el pánico de otras películas con psicópatas al volante como El diablo sobre ruedas, Nunca juegues con extraños o Death Proof.