Tras la I Guerra Mundial, Franz no tiene ni familia ni lugar donde ir. Después de una década vagando por Europa con desánimo, se instalará definitivamente en Viena. En su primera noche en la ciudad, Franz salvará a una chica de morir ahogada, momento que retratará un rápido fotógrafo.
Orlac, un pianista famoso, pierde ambas manos en un accidente. Los médicos deciden trasplantarle las manos de Vasseur, un asesino condenado a muerte. La operación es un éxito, pero desde ese momento el pianista comienza a verse embargado por impulsos criminales. Tiene pesadillas y ve el rostro de un hombre que cree que es Vasseur...