Dancer
Joanna Eberhart (Kidman) y su marido (Broderick), buscando una vida perfecta, se mudan al acomodado barrio de Stepford (Connecticut). A Joanna le intriga tanto que todas las esposas sean tan complacientes con sus maridos que, con la ayuda de una vecina bastante anticonvencional (Bette Midler), empezará a hacer indagaciones.
Sally
Donald (Zeljko Ivanek) se está muriendo de sida. Su amante James (Hugh Grant) decide ir a Fayetteville, Arkansas, para decírselo a su madre (Ann-Margret), que ha estado separada de su hijo durante años.