Midori acaba de regresar a su pueblo natal después de haber recorrido varios colegios del país. En el instituto local reconoce a Ryusuke, un amiga de la infancia. Al mismo tiempo, surge un rumor en el pueblo: por los alrededores dicen haber visto un chico guapo y misterioso que siempre viste de negro y cuya belleza es tal que los corazones de las chicas se paran y sus cuerpos caen fulminados ante su presencia.