Alberto y Jorge son empleados de un frigorífico, que un día ven un bus donde varias hermosas turistas flirtean con el guía que las conduce y piensan que ser guías les dará muchas aventuras amorosas. Consiguen entrevistarse con el dueño de la empresa de turismo y su socio (Frías Garmet y Gamarro Salas, respectivamente), que los contratan de inmediato, prometiéndoles rápido ascenso en la compañía. En realidad Frías Garmet y Gamarro Salas están planeando una estafa de gran magnitud, y necesitan dos incautos para inculparlos.
Guillermo Rossi (Javier Portales), flamante gerente de una inmobiliaria, llama a su único hermano, Jorge (Jorge Porcel), que vive en el interior del país con una tía. Jorge no tiene demasiadas luces pero sí cierta picardía. La idea de irse del pueblo y abandonar a su novia Margarita no lo seduce demasiado, pero decide partir para la gran ciudad y ponerse a trabajar. A raíz de los desastres cometidos, resuelven despedirlo, aunque Jorge prefiere quedarse en Buenos Aires, estudiar para detective e instalar una oficina de investigaciones.