1975, soplan vientos de cambio en la Portugal posrevolucionaria. Al Berto, ahora un aspirante a poeta, regresa a su pueblo natal de Sines. Se instala de forma ilegal en una mansión expropiada a su familia durante la revolución, y frecuenta a vecinos que comparten su interés por las artes y sueñan con una vida diferente. Pronto consigue un amante, João Maria, mientras provoca la ira de los residentes más conservadores.
Un duro guardián de la ley marcado por experiencias personales decide poner fin al cruel comercio de la prostitución. Dos organizaciones se enfrentarán para detener a este policia llegando al extremo de matar a su madre, secuestrar a su hija e inducirla al vil negocio de la degradación humana. En un duelo sangriento, se tirotean produciendo significativas pérdidas entre ambos frentes. El agente lucha denodadamente por destruir a las organizaciones y recuperar a su hija.